El espanto

El espanto de la gente
siempre conmigo
el espanto en mi cabeza
justifica
Qué distante todo de todo
ni invisibles ni reales
poderosas miradas que te empujan
y yo qué
si te atropella la duda
El espanto en vos.

Tiempo muerto

Ese instante de vacilación
es una eternidad encapsulada
un punto que se agranda
el pasaje a la nada que hay del otro lado
ahí se escapa todo
corriendo en un tiempo transversal
el miedo lo abre
el miedo es el agujero

Mi lugar

Por desubicarme siempre
no entiendo la complicación del mundo.
Mirando para adentro,
inmensidades simples
todo yendo a un mismo lugar
hasta que golpean a este cuerpo
y entonces unos para un lado
otros al revés
y ahí el dolor tirando.
Qué tan desubicada siempre
dónde
cómo
quién
y el dolor lo mismo.

Lo físico

Hasta que por fin rompe con esa mirada
y ahora para qué hace lo que hace
y con qué fin su vida se enrosca y sale
desde lo que viste y toma
o lo que piensa y dice
y para qué social o racional
¿ a qué mirada-Dios amado
construye su vida hoy...
Una respuesta para avanzar.
nada es más terrible que la ausencia
lo contenido, lo que no es, lo que está trabado
dejen que baje.

Una vez detrás de otra

Evoca una memoria compartida
de una noche crucial
Una inflexión en el hielo
y después zigzaguea peligrosa
Juega conmigo
Niña por siempre
Le roba la felicidad a esta cobarde
Y cada vez que el final empiece
terminando un principio infinito...
Vamos, prefiero que me mates.
Ya está.

Compañera

Soportando hasta el límite de lo soportable
se vuelve a desgarrar la fragilidad que te contiene
se abre y te quema los ojos
y te lastima la voz, desfigura tu cara
es como un agujero infinito donde se caen todas tus partes
que querés desplomarte en el aire
cada vez que te desparrames por dentro
cuántas cosas te quieren menos de lo que te demandan
escapale a las cuentas que no cierran
Fragmentan tu integridad.
Uní lo discontinuo
con los que te quieren entera.

Recuerdo

No puedo sacarme de la mano
tu mano apretando la resistencia suave.

Esta boca espera

Yo no quiero mirar
pero están acá, cada vez más cerca
y no voy a ser original.

Es tan sencillo como recordarte a vos mismo
corriendo y atropellando por llegar
Seguirías siendo el destino de las casualidades
Y no este delator inocente
Para qué estas trampas cazadoras
Si mi ilusión te buscaba siempre
Y la vida hacía el resto.

Ya está instalada la acción
ahora todos creemos lo que vemos
en esta fragilidad del acontecer, la memoria es poco
están presentes
y me envuelven con mentiras
acá es fácil olvidar.
No puedo más
ya no duermo los lunes
los martes me llevan los buques
De miercoles a domingos empiezo un proceso de limpiza cerebral
pero los lunes no duermo.

Soy toda el agua que la rodea

Yo que tantas veces fui Manuela...
y emprendí mi viaje sistemático a la isla desierta.
Pero como Marini tuve que morir
esperala siempre, vivir por ella
y morir ahí.

Si es como vivirlo, un sueño es más que eso.
Querer alcanzarla es más que esperar.
Soy toda el agua que la rodea,
me duele una isla en todo el cuerpo.
Este nombre

esta cara

desintegrarse

en el aire frío

esta voz, que se apague

lo que soy en millones de partículas

sin edad, sin pasado,

este cuerpo, cuántos obstáculos, y el dolor desaparece


desintegrarse
"Sigo buscando las drogas que puedan calmar esta sensación,
corto los hilos, me caigo al vacío y empiezo a vivir sin vos"

Esta resignación correcta no es más que una caída eterna con ganas de no haber soltado

la ilusión

Y desintegrarse para evitar

lo intranscendente,



¿Es posible todo esto y que jamás te enteres?

Un estómago revuelto

Quizá te maltrate,
quizá te olvide
o simplemente te convierta en alguien más…
cuando por dentro el impulso me empuje hacia vos.
¿Y qué hago con lo que tenía antes?
Sostenerlo y defenderlo por encima de todo,
más allá de todo.
Más allá de mí.

Qué inútil esta cosa

No te traicioné
Se perfectamente que van separadas, esta realidad. De la otra.
Pero a la hora de marcharnos los recuerdos se me mezclan.
Creo sentir con la piel del personaje, el perfume de tu piel es mío. No puedo olvidar tu mirada, no la del personaje, la tuya. Tus ojos cuando te quedas mirando la nada.
Podes confiar en mí, no hice nada malo, no pienso en esto cuando estamos allá. Me vuelve en la noche desgraciada, en los sueños intermitentes, en la soledad de mi cráneo… anula no sé qué zona de mi cerebro y todo tiene tucaraneutra.
Con la fuerza del mundo intento frenarme. Me sostengo como puedo para no salir corriendo, me tapo la boca para no decir tu nombre, y cierro los ojos cuando te veo entre mis cosas.
Te tengo miedo,
como quien le teme a la calle solitaria en la inmensidad de la noche. Ya me hiciste daño una vez, así. Caminaba sola sin mis ruidos y de golpe una invitación… a morir en vida durante varios años. Ya sé, no sos vos, pero lo sos en cierta
f o r m a . . .

No hay salida sin escapar

El refugio no llegó a tiempo. La tormenta nos alcanzó sin techo. Y yo me preguntaba cuanto tiempo aguantaría conteniendo la respiración. Si lo que te ahoga es eterno, algo que te acompaña para toda la vida y sin preguntar, yo no sé si quiero cambiar. Cuánto tiempo más le vas a dar a otros y no a mí. Cuánto tiempo más que no vuelve, tanto tiempo. Dónde estamos, ¿dónde deberíamos estar? El tiempo se va. ¿Hay alguna otra alternativa? Será que no te querés ir, será que estás mejor así. Será que no es.

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